1. Sistema inmunológico: El zinc es necesario para el correcto funcionamiento del sistema inmunológico, que protege nuestro cuerpo contra infecciones y enfermedades. Si hay una deficiencia de zinc, el sistema inmunológico puede debilitarse, aumentando el riesgo de infecciones.

2. Crecimiento y desarrollo: Durante etapas de rápido crecimiento y desarrollo, como la infancia, adolescencia y embarazo, el zinc es esencial para la división celular, síntesis de proteínas y desarrollo de tejidos y órganos.

3. Metabolismo y función celular: El zinc participa en muchas reacciones enzimáticas y es importante para el metabolismo de carbohidratos, proteínas y grasas. Además, está involucrado en la regulación de la función de diferentes órganos y sistemas del cuerpo.

4. Cicatrización de heridas: El zinc es necesario para la síntesis de colágeno, una proteína que es esencial para la cicatrización de heridas. Si hay deficiencia de zinc, el proceso de cicatrización puede ser más lento y dificultar la recuperación de lesiones y heridas.

   

Además de estas funciones, el zinc también es importante para la salud ocular, la función cognitiva, la salud reproductiva, el mantenimiento del ADN y la protección contra el estrés oxidativo.

Es importante obtener suficiente zinc a través de la dieta, ya que el cuerpo no puede producirlo por sí mismo. Las principales fuentes dietéticas de zinc incluyen: carnes, mariscos, legumbres, nueces y semillas, lácteos y granos integrales. En algunos casos, se pueden usar suplementos de zinc bajo la supervisión de un profesional , especialmente en personas con deficiencia de zinc o situaciones específicas que requieran una mayor ingesta.

Sin embargo, tanto la deficiencia como el exceso de zinc pueden tener efectos negativos en la salud, por lo que es importante obtener el zinc necesario a través de una dieta equilibrada y consultar con su médico antes de comenzar cualquier suplementación.

Cómo identificar si tengo deficiencia de Zinc

La deficiencia de zinc puede manifestarse de diversas formas y los síntomas pueden variar de una persona a otra. Si sospecha de una posible deficiencia de Zinc, algunos signos y síntomas a tener en cuenta son:

Se debe tomar en cuenta que estos síntomas pueden ser causados por diversas condiciones de salud y no son exclusivos de la deficiencia de zinc. Si sospechas de una posible deficiencia de zinc, es recomendable pasar por una evaluación adecuada. Se pueden realizar análisis de sangre u otros estudios para determinar los niveles de zinc en el cuerpo y brindar un diagnóstico preciso.

• Lactantes (de 0 a 6 meses): 2 mg al día.

• Lactantes (de 7 a 12 meses): 3 mg al día.

• Niños (de 1 a 3 años): 3 mg al día.

• Niños (de 4 a 8 años): 5 mg al día.

• Niños y adolescentes (de 9 a 13 años): 8 mg al día.

• Adolescentes hombres (de 14 a 18 años): 11 mg al día.

• Adolescentes mujeres (de 14 a 18 años): 9 mg al día.

• Adultos hombres (mayores de 18 años): 11 mg al día.

• Adultos mujeres (mayores de 18 años): 8 mg al día.

• Mujeres embarazadas: 11 mg al día.

• Mujeres en período de lactancia: 12 mg al día.