• Sistema nervioso: El hierro también es importante para el funcionamiento del sistema nervioso, ya que contribuye a la producción y función de neurotransmisores, que son las señales químicas que permiten la comunicación entre las células nerviosas.
• Desintoxicación: El hierro juega un papel en la desintoxicación celular al ayudar a neutralizar y eliminar sustancias nocivas del cuerpo.
• Mielinización: El hierro también juega un papel en la formación y el mantenimiento de la mielina, una sustancia que recubre las fibras nerviosas y permite la transmisión eficiente de las señales nerviosas. La mielinización es esencial para la rapidez y la coordinación de las señales entre diferentes partes del cerebro.

La deficiencia de hierro puede llevar a problemas de concentración, fatiga, disminución de la memoria y alteraciones en las funciones cognitivas.

Por otro lado, el exceso de hierro en el cerebro también se ha asociado con problemas neurodegenerativos y acumulación de proteínas relacionadas con enfermedades como el Alzheimer.

• Prevención de estrés oxidativo: El cerebro es particularmente susceptible al estrés oxidativo debido a su alto consumo de oxígeno y la presencia de lípidos sensibles. El hierro participa en la prevención del estrés oxidativo al ayudar a neutralizar los radicales libres y mantener un equilibrio antioxidante.
• Funciones ejecutivas: Las funciones ejecutivas del cerebro, como la planificación, la toma de decisiones y la resolución de problemas, dependen de la función adecuada de las áreas cerebrales y de los neurotransmisores, que a su vez requieren un equilibrio de hierro.

La suplementación de hierro

Existen varias vías para administrar el hierro que se utilizan para tratar y prevenir la deficiencia de hierro. Aquí te presentamos algunas de las formas más comunes:

a) Suplementos de hierro oral: Estos son comprimidos o líquidos que se toman por vía oral. Son ampliamente utilizados para tratar la deficiencia de hierro. Los suplementos orales de hierro están disponibles en varias formas, como sulfato ferroso, gluconato ferroso, fumarato ferroso, y otros. Se toman con el estómago vacío para una mejor absorción, generalmente con un vaso de jugo de naranja o limón para mejorar la absorción del hierro.

b) c) Inyecciones de hierro intramuscular: Aunque menos comunes que las infusiones IV, antiguamente se administraban inyecciones de hierro directamente en el músculo. Esta práctica ya no se utiliza ya que resulta muy dolorosa para el paciente y gran parte del producto se quedaba en la zona y no se absorbe.

c) Infusión de hierro endovenoso: Cuando la administración oral de hierro no es eficaz o está contraindicada debido a problemas de absorción intestinal, intolerancia gastrointestinal o la necesidad de una corrección rápida de la deficiencia de hierro, se puede administrar hierro por vía intravenosa (IV) en una clínica u hospital. Esto se hace bajo supervisión médica y permite una absorción más rápida y completa del hierro.

Desde el área de Hematología, hemos implementado un nuevo servicio en nuestro consultorio: contamos con un espacio dedicado a la administración de hierro endovenoso para nuestros pacientes.